El Fiat Uno contó con muchas versiones deportivas y especiales a ambos lados del océano y no fueron pocos los especialistas que se animaron a modificarlos y mejorarlos.

Si usted todavía no conoce las diferencias entre el Fiat Uno europeo y el Fiat Uno sudamericano le sugerimos leer la primera parte de la historia antes de continuar con el presente artículo de esta saga por los 40 años del modelo.

VERSIONES DE FÁBRICA:

Sin dudas, la versión más conocida ya que estuvo casi una década en producción. Se exportó a muchos mercados del mundo y fue un hot hatch que marcó época. La primera generación apareció en 1985 con un interesante trabajo en el chasis con amortiguadores, resortes, barras estabilizadoras rediseñados y 4 frenos de disco.

Mecánicamente se utilizó el motor 128 de 1.301cc al que se le añadió un sistema de inyección Bosch  y un turbocompresor erogando 105CV a 5.500rpm que le permitían orillar los 200Km/h y acelerar 0-100 en 8,9s.

En 1989 se lanza la segunda generación utilizando de base el motor Tipo 1.4 (evolución del 128) con 1.372cc con inyección Bosch L-Jetronic, un turbocompresor Garret T2 erogando 118CV a 6.000rpm y 16,8 kgm a 3.500rpm alcanzando los 204km/h y una aceleración en 7,7s.

Particularmente la segunda generación  importada en Argentina a principios de la década de 1990 en cantidades limitadas, era un modelo buscado por los fanáticos de la marca.

Como explicamos en el artículo anterior en Argentina el Fiat Uno se posicionó como un compacto de alta gama y equipó de serie el motor 1.5 de 82CV, luego reemplazado por el motor Tipo 1.6 de 87CV en 1990.

Esas mecánicas se aprovecharon en Brasil para crear variantes de corte deportivo como los 1.5R/1.6R, si bien los motores tenían menos compresión resignando un poco de potencia debido a la calidad de los combustibles brasileños, ofrecieron una suspensión más firme y relaciones de caja arrimadas a diferencia de las unidades argentinas donde se utilizaron relaciones largas para favorecer el consumo y suspensiones más mullidas.

En 1993 se presenta el Uno 1.6R mpi utilizado una variante del motor Tipo 1.6 con inyección multipunto y 92CV que la fábrica argentina de CORMEC producía para exportación, nunca utilizado en modelos de Sevel Argentina.

En 1994 Fiat do Brasil decide reemplazar el Uno 1.6R mpi por su propia versión del Uno Turbo i.e. utilizando la mecánica italiana 1.4 de 118CV aunque conservaba los esquemas de suspensiones de los Fiat Uno Sudamericanos con puestas a punto especialmente para el modelo, siempre conservando los frenos de tambor traseros, todo ello acompañado con un kit de carrocería específico.

Según test de época el Fiat Uno Turbo brasileño llegaba a los 195km/h y aceleraba en 8,5s, las diferencias en las prestaciones con respecto al modelo europeo se debían a la menor aerodinámica (CX 0,36 vs 0,30) y al mayor peso. Solo se produjo durante 2 años totalizando 1.081 unidades debido a que el motor se discontinuó en Italia.

El santo grial de los Fiat Uno deportivos debido a que la marca solo construyó una sola unidad con esta configuración.

En 1987 mientras  Sevel argentina estaba desarrollando el Fiat Uno con motor 1.5 de 82CV paralelamente también trabajaron en una versión deportiva con mecánica Fiat Regatta 2000 (una versión que solo existió en la Argentina).

Para la construcción del prototipo se uso una unidad fabricada en Brasil y fue entregada a  Aldo Baldoni de IAVA (la división deportiva de la marca en la Argentina) – ver también – para que realice el desarrollo.

Se colocó un motor Lampredi Bialbero de 1995cc con nuevos árboles de levas diseñados por Baldoni, el impulsor estaba acoplado a la caja de velocidades del Regatta 2000, también se cambió la puesta a punto de amortiguadores, resortes y barra estabilizadora. El Fiat Uno 2000 alcanzaba una velocidad punta de 189km/h y aceleraba 0-100 en menos de 9s.

El mayor tamaño del impulsor obligó a colocar la rueda de auxilio adentro del baúl.

Se recorrieron más de 50.000km de pruebas de todo tipo, se ensayaron kits aerodinámicos para una posible entrada en competición y luego se modificó adoptando elementos de máximo confort como lavafaros, butacas deportivas y dirección asistida, aunque finalmente descartaron la fabricación por el alto costo y elevado consumo.

La existencia de un Fiat Uno con mecánica 2 litros fue nombrada en un párrafo de una revista Parabrisas de 1988 pero no se supo más nada del auto hasta que en 1997 Sevel Argentina decidió subastar el único ejemplar existente, que permaneció guardado en los galpones de la fábrica por casi una década, y desde entonces el único Fiat Uno 2000 participó de muchos eventos de autos clásicos en la Argentina.

PREPARADORES INDEPENDIENTES:

Alrededor del mundo hubo muchas empresas de tunning que se desarrollaron versiones personalizadas del  Fiat Uno como fue el caso de Zender, Hormann, Fun Factory, FIAVE, Sulam, Dimma. Hofele Design, Moretti, etc. En muchos casos solo se trataban del kits de carrocería con algunas sutiles modificaciones mecánicas, por tal motivo vamos a destacar a los que según nuestro criterio hicieron las preparaciones más interesantes:

A mediados de los 80s el preparador romano Giannini ya ofrecía un kit de turbo para el Fiat Uno 45 equipado con el motor de 903cc 45CV elevando la potencia a 78CV. En 1990 realizaron un interesante desarrollo sobre el Fiat Uno Turbo i.e. de segunda generación.

El impresionante kit de carrocería conseguía un cx=0,27 además de tener un difusor trasero variable, todo eso acompañado con una puesta a punto específica de la suspensión y una reducción de peso a 775Kgs..

Por el lado de la mecánica según Giannini conservaba la inyección electrónica L-Jetronic, el Turbocompresor Garret T2 y la relación de compresión del modelo de serie, pero se modificaron tapa de cilindros (que seguía siendo de 8 válvulas), admisión, escape, intercooler y demás componentes obteniendo 148CV a 6.500rpm y 22 kgm a 3.800rpm que le permitían alcanzar los 225km/h.

Desde mediados de los 80s Novitec ofreció varios kits de potenciación para los Fiat Uno Turbo europeos de primera y segunda generación con potencias de entre 125 a 170CV.

No obstante en 1993 desarrollaron una versión especial con la cilindrada aumentada a 1.6 litro y una preparación de  197CV que le permitían alcanzar los 240 km/h y acelerar 0-100 en 6 segundos. El auto equipado con elementos de competición y el interior había sido completamente removido para colocar la jaula antivuelco. Novitec solo construyó 4 ejemplares de este modelo, uno de ellos en color amarillo y los restantes en color azul.

En Febrero de 2021 Novitec publicó un video en sus redes con una unidad en color azul que fue recomprada por la empresa y restaurada a sus condiciones originales.

En 1988 el concesionario Daniel Carbone Caballero se contactó con el reconocido constructor de autos de competición Edgardo Fernández con la idea de crear una versión de altas prestaciones del Fiat Uno SCV, naciendo de esa manera el legendario Fiat Uno EF. El auto se destacaba por el gran alerón trasero, los pasarruedas ensanchados y el splitter delantero creados para aumentar la carga aerodinámica.

Pero lo más importante estaba debajo de la piel, el Fiat Uno EF no tenía un solo tornillo del modelo de serie ya que equipaba suspensiones independientes con resortes helicoidales hechas a medida por Edgardo Fernandez, una cremallera de dirección más directa y precisa, 4 frenos de disco e importantes refuerzos estructurales para aumentar la rigidez torsional.

Por el lado de la mecánica opcionalmente se podían montar kits desarrollados por del conocido motorista de competición Rafael Ballestrini en versiones de 115CV con un solo carburador y 170CV con dos carburadores, una potencia sobresaliente para un motor 1.6 aspirado con leva de calle.

Sólo se construyeron 40 unidades del Fiat Uno EF en los 5 años que estuvo en producción, se ofreció en tres colores: rojo, negro y celeste.

DESCAPOTABLES:

Nunca existió una versión convertible de serie del Fiat Uno y por tal motivo fueron muchos los carroceros que desarrollaron su propia variante personalizada, en algunos casos con dudoso resultado estético. Por tal motivo vamos a destacar a los que creemos que hicieron el mejor trabajo y aportaron una versión exclusiva al modelo.

El primer Fiat Uno convertible del mundo se hizo sobre la base del modelo sudamericano tan solo 3 meses después de la presentación en Brasil en 1984.

El Fiat Uno Sultán creado por Sulam Equipamentos Esportivos Ltda con sede en Sao Paulo, una compañía especializada en la personalización de coches. El Uno Sultan utilizaba el motor FIASA de 1.297cc 70CV que obtenía prestaciones pobres por el agregado de 134 kilos de refuerzos estructurales.

La empresa también se animó a crear una versión targa del Fiat Premio/Duna pero en ese caso también se ofreció un kit de turbo para el motor FIASA 1.5 que elevaba la potencia a unos 90CV.

En 1986 el carrocero Moretti con sede en Turín presenta el Fiat Uno Folk con techo de lona del tipo targa en un claro guiño a los Fiat de épocas pasadas con un resultado estético muy logrado.

Por el lado de la mecánica se habían elegido las versiones más básicas del Fiat Uno en dos opciones de motor, una versión naftera con el motor FIRE de 999cc 45CV y una diésel con el impulsor FIASA de 1.300cc también con 45CV.

En 1989, un año después del lanzamiento del Fiat Uno SCV en la Argentina, la empresa Terribetti (acrónimo de los apellidos de sus fundadores  Terrizzano y Colombetti) desarrolla una estilizada versión convertible que hizo soñar a los argentinos.

El modelo ganó notoriedad por ser haber aparecido en una popular publicidad televisiva de vino de principios de los 90s. Se fabricaron alrededor de 50 unidades de este convertible, algunos de los cuales fueron encargados por clientes famosos. Las primeras unidades montaron los motores 128 1.5 de 82CV para luego pasar al motor Tipo 1.6 de 87CV.

La empresa FIAVE creada por Norberto Vigano tiene una larga experiencia en fabricación de vehículos artesanales, accesorios de personalización y elementos de competición. Con la llegada del Fiat Uno SCV al mercado argentino FIAVE empezó a ofrecer kits de carrocería y algunas mejoras mecánicas.

En 1990 decidió ir un paso más allá y desarrolló una versión convertible que algunas personas confunden con el Terribetti y aquí debemos detenernos para hacer una aclaración importante porque según palabras del propio Norberto Vigano FIAVE solo construyó 3 unidades de este descapotable en los colores bordó, negro y gris plata respectivamente, en todos los casos equipados con el mencionado kit de carrocería y el motor Tipo 1.6 sin modificaciones en la parte mecánica, de esa forma esperamos haber despejado las dudas de los fanáticos del modelo.

Un auto casi desconocido del que solo se construyó una sola unidad en 1990, tampoco existen datos sobre las especificaciones técnicas y la mecánica utilizada. Pero decidimos incluirlo porque fue el convertible más bonito realizado sobre la base del Fiat Uno europeo de segunda generación.

Investigación y Textos: © Fabián Matías Rossi para TargaSport

Fotos: Fiat Auto Spa, Fiat do Brasil, Cristian Hernán Fernández (Fiat Uno 2000), Rubén Omar Ramos (Fiat Uno 2000), Giannini, Novitec, Revista Parabrisas, Test del Ayer, Sulam, Moretti, Automovilismo en el Recuerdo, Carrozzerie Italiani.